Glenn McConell de Auckland, Australia, decidió un experimento interesante. Está listo por un tiempo para abandonar todos los dispositivos de alta tecnología y regresar a la década de 2000. Ahora, en lugar de su iPhone, usa un viejo teléfono de botón.
Glenn señala que inmediatamente después del comienzo de su experimento, tuvo dificultades para comunicarse con sus amigos. Resultó que ahora contactarlo a través de Instagram, Facebook o WhatsAp es simplemente imposible. Necesita escribir SMS o, lo que es peor, llamar al teléfono.
“En los últimos años, las fallas tecnológicas se han vuelto más evidentes. De ninguna manera creo que debamos renunciar a todo lo que las nuevas tecnologías pueden ofrecernos, pero creo que debemos tener cuidado de perder para poder usarlas ”, dice Glenn McConnell.
La tecnología está cambiando nuestras vidas.
Estudios recientes de los efectos de Internet, que algunos neurocientíficos sugieren que nos hacen más tontos, nos han permitido responder esta pregunta de una vez por todas. Los estudios en la Universidad Macquarie muestran que, si bien los teléfonos inteligentes nos dan acceso a más información y nos permiten comunicarnos más rápidamente con amigos, nos estamos volviendo menos sociales y menos conscientes de los hechos.
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Mark Williams, profesor de neurociencia, dice que los teléfonos inteligentes nos hacen luchar con la concentración, a medida que nos desplazamos por la información que recibimos del mensaje, y luego pasamos de una notificación a otra. En pocas palabras, dependemos de nuestros teléfonos.
Social en internet
El hombre moderno ha formado comunidades en línea, lo que permite a las personas expresarse y establecer conexiones fuertes a través de Internet. Ahora podemos ver y aprender sobre el mundo en tiempo real desde nuestros propios hogares. Y las aplicaciones de viaje como mapas, Uber e incluso automóviles automáticos están revolucionando el transporte.
En el año 2000, tenía que recordar el horario del autobús o tener su propio automóvil. También fue más difícil acceder a la información y más difícil escuchar su mensaje.